A buen entendedor
Antes de brindar el primer discurso como intendente de la Capital Nacional del Mármol Ónix, Ernesto Alí proyectó un video que resume en que condiciones recibió a la localidad. Como subrayamos en la nota de cobertura, el contenido multimedia que muestra desamparo, falta de limpieza y una estructura urbana abandonada, contextualizó lo que más tarde remarcaría en su alocución: «Es tiempo de que La Toma cambie».
Sin embargo, no dejó de lado la herencia recibida resumida en tres segmentos de su discurso:
“Debo anunciar la adquisición de un parque automotor nuevo, porque el actual es obsoleto. Me encantaría poder anunciar grandes obras municipales, pero tengo que limitarme a resolver los problemas esenciales, alumbrado, barrido, limpieza, cordones, veredas, calles, agua potable.”.
“Dos de las principales causas de la pobreza material en nuestra zona son la corrupción y la incapacidad práctica e incapacidad de los gobernantes elegidos. Esa «mala praxis» moral y técnica tiene como consecuencia directa e indirecta la miseria de personas que viven en indigencia y con un futuro hipotecado por la falta de servicios públicos de calidad».
«¡Se acabó!».
«Vamos a elevar la vara de la honestidad, la transparencia y la decencia a sus límites máximos y darle tranquilidad a los que nos han elegido con nuestra gestión”.
