El domingo la cancha fue de ellos
Los niños se adueñaron de las flamantes instalaciones del Club Deportivo Pringles. «Me lo reclamaban cada vez que me los cruzaba. Habían jugado todos menos ellos y pensamos que era hora de que disfrutaran de las instalaciones» contó el interventor Gustavo Paez.
Efectivamente, las formativas de la institución eran las únicas categorías que no habían pisado el césped sintético. Y finalmente les llegó el día.
Divididos en grupos y en turnos de horarios disputaron partidos a lo largo de toda la tarde dominguera, bajo la atenta mirada de entrenadores, responsables del club y colaboradores que además de supervisar el cumplimiento de los protocolos del club se encargaron de repartir gaseosas y frutas entre los pequeños que terminaban de jugar.
«Estamos trabajando para que se cumplan todos los cuidados y por suerte los chicos se portaron muy bien. Es muy lindo ver como disfrutaban en la cancha porque ellos también son dueños de esto«, agregó Paez.